OFRENDA
Hay veces en que la noche
une sus manos y vierte
en ellas dulce el vino
del que tú bebes sagrada
desnuda como una diosa.
Y entre tus labios y sus dedos
algunas gotas se pierden
caen granas hacia mi pecho
animal marcado, ebrio
y dispuesto al sacrificio
muerde, devórame hambrienta
come hasta que no quede nada
en esta ofrenda a la vida
de amarnos con violencia.
1 comentario:
El primer verso y medio ya es matador...
Publicar un comentario